miércoles, 16 de enero de 2008

martes, 15 de enero de 2008

La extraña

Es muy raro todo lo que estoy sintiendo. Antes de terminar el primer trimestre, un día dije que estaba donde quería estar. No sé si me paré mucho a pensarlo. Creo que no.

La vuelta ha sido extraña y desconcertante. Me siento desubicada, como si perdiera el tiempo, como si nada tuviese sentido. Y no sólo en las clases. Es como si nada tuviese sentido. Quiero irme de casa pero no puedo irme sola. La única oportunidad sería plantearme hacerlo con Sergio. Pero no me apetece. ¿Dónde me lleva eso? ¿Es que nunca voy a tener ganas de vivir con él? De ser así, ¿a dónde me conduce esta relación?

Lo pasamos bien (normalmente), nos reímos, nos compenetramos...pero no sé qué más hay. A veces creo que hay algo pero no lo dejo salir y otras creo que no hay nada debajo de la superficie. Que nos divertimos juntos pero nada más. Al menos por mi parte, aunque creo que por la suya no es así.

Sigue faltándome la confianza en mí misma y en él y ni siquiera me apetece hablarlo para aclarar las cosas, para hacer desaparecer los fantasmas.

Últimamente me apetece estar más tiempo sola y no soy capaz de pedirlo porque no creo que lo entienda. Además, no sé en qué podría desembocar. Puede que le asustase sin motivo. O lo que es más grave, que le asustase con motivo. Supongo que tengo miedo de estar sola porque no sé estarlo. Ya se me ha olvidado después de tanto tiempo de idas y venidas.

A veces sólo tengo ganas de marcharme de aquí, de escapar, de estar sola de verdad. Dani no me necesita, ya no hago nada por él aquí. Está recuperado, en plena forma y me da la sensación muy a menudo de que le entorpezco más que enriquecerle de alguna manera. Me partiría el alma marcharme y dejarle atrás pero puede que sea lo mejor. Puede que si no me tiene cerca pueda empezar una vida que a mí no me duela. Y sobre todo, que yo no le haga daño a él. Eso es lo que más me importa.

No tengo ganas de seguir cuestionándome si lo que hago está bien o mal. Sólo quiero descansar. Ojalá pudiese marcharme y dejar todo atrás. Ojalá tuviera medios. Pero sobre todo, ojalá tuviera valor.

domingo, 13 de enero de 2008

"No sé qué hacer contigo" (más bien conmigo)

Uff, la vuelta a clase ha sido muy dura. Estoy muy desmoralizada, no sé por qué y eso que los exámenes han ido muy bien. He sido la mejor de mi clase. Pero tengo la sensación de no estar aprendiendo realmente y lo que es peor, creo que no le caigo bien a la gente en mi clase.

No encajo en ningún lado, no encajo con nadie. Me siento muy sola.

miércoles, 2 de enero de 2008

Idas y venidas

La vuelta a la convivencia con mi hermano parece estar siendo algo menos traumática, pero sólo en apariencia. Por dentro, me mata tener que volver a tenerle en casa, sin que eso signifique que no me preocupe que lo esté pasando mal. También lo pasaba yo mal hace un año y ni dios me hacía caso. Como nunca me lo han hecho. No sé por qué me extraña. Sólo era la que sacaba al perro, sólo soy la que recoge la casa cuando la mierda nos come...no soy nada para ellos y en realidad, no soy nada para nadie.

Si de algo me ha servido la ruptura de mi hermano es para recapacitar, más aún , sobre mis propias relaciones. Cada cierto tiempo me ocurre algo que me hace darme cuenta de que aún sigo sin cofiar en Sergio. Que sigue sentándome mal que quede por ahí porque muy en el fondo aún le doy cabida a la posibilidad de que me la esté pegando y no me entere. Porque sigo pensando que es capaz de hacerme daño otra vez. ¿Qué futuro puedo esperar de una relación así? ¿Hemos tenido futuro alguna vez o esto sólo era una vuelta a mi rutina de relaciones de menos de dos años de duración?

En todo este año me siento como si no hubiese avanzado ni nu paso y no puedo darle lo que él anhela. No puedo seguir su ritmo porque yo aún estoy estancada en el 2006, cuando todo estaba hecho un lío. yo sigo estando hecha un lío. Y para colmo, mi único punto de apoyo está definitivamente levantando el vuelo. No es que no me alegre. Claro, que me alegro, y me siento orgullosa. Pero a la vez me quedo sola aquí abajo, viendo como otra pájara acabará por hacerse con lo que siento como mío, aunque fui yo quien lo apartó de mi lado. Qué hija de puta y que egoísta soy. Supongo que como él dice hay que asumir cuanto antes la ausencia de las cosas que ya no tenemos. Pero a diferencia de él, tampoco puedo disfrutar de lo que sí tengo porque siento que no tengo nada.

No tengo ganas de ver pasar otro año, y otro, y otro. Me planto en el 2008.